Si hablamos de términos relacionados con la paternidad, Lechón es uno de esos que definen a la perfección multitud de situaciones.
Pero antes de entrar en el ajo, vamos a ver qué significa para un servidor la palabra Lechón. El lechón o lechona es esa persona inocente, ignorante, primeriza, novel pero con el toque de "buena intención" que hace que le cojas cariño del sano. Los lechones son tipos/as que se dejan querer...
Como os decía antes, la paternidad trae consigo aconteceres que hacen del papá primerizo el mayor de los lechones:
- Entras al hospital con tu chica embarazada, vais a ser papás: genial. Al salir sois 3 y no os han dado el libro de instrucciones. Por el camino desde la clínica a casa vas a 31 km/h y al llegar a casa lo haces con la niña berreando y tú más pálido que Iniesta en invierno: lechón.
- Te acercas a la tienda de ropa de bebés más mona del centro comercial, y compras un pijamita precioso: 45 euros. A los dos meses le queda pequeño y se lo has puesto cinco veces: lechón. El Primark y C&A entran en escena...
- Las primeras semanas te levantas por la noche, aunque tu niña siga dormida, para ver si respira: lechón.
- Se ha hecho un pipí de noche y la despiertas para cambiarle el pañal: lechón. Y el karma te castigará dentro de unos meses con un niño madrugador.
- Tu selección gana un Mundial por primera vez en su historia y no gritas por no despertar a la "Muy": lechóoooooooooooolllll de Iniestaaaaa.... ¡ay! digo lechón.
- Y pasan los meses, los años... y tus defensas empiezan a flaquear, empiezas a pensar en buscar el segundo hijo: LECHÓN. Este último, aún no podéis atribuírmelo porque mis defensas siguen en alerta, aunque ya os digo yo que alguna ha empezado a bostezar...
genial....simplemente genial, me ha encantado y me he reído muchísimo porque también soy mu lechona jajajajaja
ResponderEliminarSi es que el mundo de la paternidad reúne a los mayores lechones del reino... ya te lo digo yo. Otra de las situaciones es cuando vas a comprar el carrito de turno y ves esos de ruedas de 4x4 y frenos de disco, aunque en eso debo decir que no caí, que me fui a la oferta de turno de la marca Chicco (600 euros de oferta por el trío... menuda oferta: lechón, jajaja)
Eliminarjajajajajaja ahí te gano lechoncillo...el mío fue el solo de Jané 535 de nada (LECHONA) ;) que las ruedas 4x4 no son lo mío
Eliminarjajaja, me ha encantado tu post <3
ResponderEliminarMuhas gracias Yuria, ahora me paso por tu blog, que no lo tengo muy controlado!
EliminarChau!
¡Hola! he entrado a tu blog por esta entrada en concreto ¡pero todo él me encanta! Felicidades. La entrada genial!, muy chula! te invito a ver la mía (la 9)
ResponderEliminarMe pasoooo...
EliminarY mil gracias por entrar por aqui y comentar!
genial.. muy bueno... lo del mundial te ha dejado marcado...jejejeje..
ResponderEliminarLo del mundial ha sido un drama, si es que fue un día muy duro y muuy largo, teneis que entender a este futbolero de pro...jeje
EliminarJajaja!!! No conocía ese palabro y hoy ya me has sorprendido con 2!!
ResponderEliminarY es que con el primero somos muy lechones pero con el segundo un poco menos!! Aunque yo seguía levantando me para ver si respiraba.
Saludos
Mmmm, no conocías ni lechón ni chismático, eh? Para aquellos que no entendeis este comentario debo decir que por twitter hemos tenido una de esas reuniones nocturnas unos cuantos bloggers y, como casi siempre, acabamos con el alcohol, los copazos y los "chismáticos".
EliminarUn beso Mª José!
Mira no hubiese caído en aplicar esa palabra a padres primerizos pero queda de putísima madre (que me perdone Gretzky) :P
ResponderEliminarLo del pijamita es de lechón absoluto jajajajajajaja lo que me he reído.
Un besote desmadroso
ps ¿vamos a por el segundo eh? ¡MUY bien!
No, no,... no he dicho que vayamos a por el segundo, jaja, he dicho que empiezo a valorar la posibilidad de intentarlo... venga, vale, soy un lechón.
EliminarGracias por pasarte a comentar Desmadrosa!
Jajajaja, me gusta Lechon para atribuirselo a los papas primerizos,me ha gustado tu entrada jajaja
ResponderEliminarUn Abrazo
Me alegro, mi única duda es si con els egundo seguiremos siendo lechones... supongo que un poco menos y, si he de serte sincero, me da un poco de lastimica. En el fondo me mola la sensción de empezar con algo nuevo e ir aprendiendo de cero.
EliminarUn beso Aida!
Te prometo que pensé que ibas a asociar el lechón con el bebé recién nacido, rosadito y tierno!! Ja, ja, qué bueno. En mi casa el Papi y yo hemos sido lechones integrales (y aún lo somos, qué caray) :-D
ResponderEliminarEso, eso... hay que tener siempre ese punto lechón que nos permita seguir sorprendiéndonos ante las cosas de los hijos!
EliminarAhora que lo dices, el término lechón también se puede aplicar a los bebés recién nacidos, jaja
Chau María Isabel!
Muy muy bueno eso de lechón, desde luego tiernos tiernos si que somos hasta que salimos con el pijama de 45 Euracos y el guantazo te vuelve del revés. Muy bueno!
ResponderEliminarEse pijama deberíamos enmarcarlo y colgarlo del salón, para aprender del error cada vez que lo veamos.
EliminarUn abrazo lechón frikerizo!
Jajaja, Mothercare y Prenatal se alimentan de lechones como nosotros, menos mal que aprendimos la lección pronto.¡Me ha encantado, como siempre!
ResponderEliminarMothercare y Prenatal han ido cerrando poco a poco sus tiendas... es normal, la crisis afecta incluso a la ilusión de los padres lechones de hoy en día.
EliminarGracias por pasarte jefa!
jajaja, muy bueno! reconozco muchos momentos descritos, volver a casa a 30 por hora, levantarte a ver si respira... jajaja
ResponderEliminarPues si, y hay muchísimos más momentos lechón... tenemos un montón de aparatos, juguetes, instrumentos que nuestra hija no ha usado nunca o ha usado muy pocas veces. Al final hemos decidido donarlos o venderles en segundamano,... hay que recuperar parte de la inversión, jajaja
EliminarAcuérdate de las dos sombrillas que compramos... ¡lechones!
EliminarMuy bueno, sí señor. He de deciros desde la distancia de los años que todos los abuelos también fuimos lechones. Y diría más: Todos los abuelos seguimos siendo lechones cuando intentamos con nuestros consejos que nuestros hijos no lo sean.
ResponderEliminarAhora he comprendido que ser lechón es algo inevitable y consustancial con la situación de padre primerizo. Con el segundo hijo aparentemente uno ya no es lechón; pero te dan unas ganas de levantarte a ver si respira...
Muy bueno pater! Pues sí, supongo que ser lechón es parte del guión, al igual que dar consejos a los hijos-papás-primerizos... mero claro, los lechones no atienden, sólo tienen oídos para sus hijos.
EliminarY con el segundo, seguro que también nos leventaremos de noche a ver si respira, pero lo haremos a turnos...
Creo que todos hemos pasado por la etapa de lechón o lechona, de hecho aún estoy inmersa en ella y bueno, la verdad no me arrepiento porque esto me ha permitido abrir los ojos un montón. Saludos!!
ResponderEliminarNo te arrepientas nunca de eso, es importante conservar ese punto inocente de primerizo! Esa inseguridad nos va a jugar malas pasadas, pero formarán parte del anecdotario de una vida!
EliminarGracias por pasarte Mamá Merlín!
jajajajajaja, Lechones a mansalva....
ResponderEliminarLechones hay en todos lados, pero la concetración de lechones mayor está en las maternidades de los hospitales, jaja
EliminarJejejejeje....
ResponderEliminarMe ha encantado, lo de los 31 km/h al salir dl hospital yo creo que es porque nos lo inoculan en el paritorio... "se lleva usted una matrioska de cristal de bohemia, ya puede tener cuidado con el coche". Y lo de cambiarle el pañal cuando se ha hecho pis, 100% cierto pero claro... sólo con el primero... el lechón aprende y dejar de ejercer como tal... jejeje
Un abrazo
El lechón, con el segundo, pasa a ser cochino adulto, jajaja.
EliminarNo lo había visto así, una matrioska de cristal de bohemia, desde luego es un buen simil, porque piensas que en cualquier bache se va a despiezar: un brazo en el salpicadero, un codo por allá... uff, me estoy poniendo gore, sorry.
Chau Pilarín!
Jajaja, como caemos todos en lo mismo, si es que somos taaaan inocentes.... Es verdad que con el segundo ya has aprendido "un poco", como dice Mª José, y eres menos lechón, pero seguro que sigues sin gritar goooool!!!
ResponderEliminar¿Tu crees? Creo que con el segundo, cuando lo tenga, tendré la habilidad de organizar mejor los planes y las finales de mundial... los niños se van a la cama en la habitación más alejada de la tele y donde no haya ventanas (es decir, los acuesto en la bañera).
EliminarSee you Didi!
Lechón, que te están convenciendo. Al menos no seas tan lechón como uno que conozco bien, e intenta que cuadren las fechas para aprovechar la ropa.
ResponderEliminarY aceptas con una gran sonrisa todos aquellos juguetes que ocupan más que tú aún sin tener espacio físico donde dejarlos. Y no les dices a los "simpáticos" que te paguen el alquiler de un trastero: lechón.
Jajaja, no creas que no hemos pensado en lo de cuadrar fechas, pero con esto de los embarazos es tan aleatorio Moi!
EliminarEy, es verdad lo de los peluches de tamaño king size, conseguimos un Trisky en Port Aventura con más embergadura que Pau Gasol y no cabe ni por la puerta de casa: lechón, si.
ese Moi!
Coincido con Cuestión de madres: el mundial te sigue doliendo mucho... ¡¡y lo entiendo!! :D
ResponderEliminarMe ha hecho gracia la entrada, porque lechón es una palabra que yo uso mucho también, jaja. Y me han encantado los ejemplos que has ido poniendo.
Ey, eres la única persona que usa esta palabra, que para mi es tan cotidiana... creo que se la escuhé por primera vez a una pareja muy admirada: Gomespuma se llamaban los principiantes de entonces...
EliminarY sí, el Mundial me tiene ofuscado, jajaja y ahora hemo ssufrido la etapa de Mou en el Madrid y la racha no es muy allá, jajaja.
Muy buena tu definición de lechón! Buen día!
ResponderEliminarGracias por pasarte, e igualmente, have a nice day!
EliminarJajajajajajaja. Suscribo todas y cada una de tus lechonadas... y añado la de la búsqueda de la niña ;P Creo que casi mejor nos conocemos cuando se me pase el arroz, porque cuando vea a la little... ayyyyyyyyyyyy.
ResponderEliminarBuenísimo, como siempre. Un beso!
Cuando veas a little te entrarán ganas de ir a por el tercero? Lo tuyo es afición y el pobre Santo Varón tendrá poco que negociar, jejeje
EliminarUn beso Nieves!
jajajajaja es buenísimo!!! Tus entradas son mundiales! Con Lechón me hiciste morir de risa... si seremos lechones los papás primerizos.... jajaja cuando parece que ya somos zombies a los walking dead y nos matenemos en pie en piloto automático... se nos cruza la descabellada idea de darle un hermanito jajajaja lechón, lechón, lechón... confieso haberme mandado todas las lechonadas! Aunque al padre finalmente lo tuve que mandar a la cancha porque se estaba volviendo azul y grana de no gritar los goles!!!
ResponderEliminarUn abrazo, sos groso che!
Me encatna que me comentes, si es que el rollo argentino me va mucho. Un día que paseis por España teneis que hacernos una visita que tengo muchas ganas de conoceros, Pao y familia!
EliminarDalo por hecho che!!! Un abrazo de gol
EliminarEy, te juro que no había leído tu entrada antes de escribir la mía. Me ha encantado!!! Además es algo que me faltaba, la visión de un papá, jejeje!
ResponderEliminarUn abrazo!!!
Una lechona confesa ;)
Jajaja, he visto tu entrada esta mañana y me ha parecido buenísima la coincidencia... tranqui que estoy seguro que no hay ningún plagio, sobre todo porque tu post está hecho como debe hacerse, en un tono formal, no como yo que soy un tipo payasil para todo... que ya lo dice mi hermano: "nunca te vas a tomar nada en serio?".
EliminarUn beso lechona!
Ay lechoncillo lechoncillo... yo en realidad creo que los papás pecáis más de lechones que las mamás... si es que de tontos sois más buenos... jajajaja ya tengo ganas de leer tus peripecias con el segundo peque ;)
ResponderEliminarPues te voy a dar toooda la razón, los muchachos somos del género simple y bobo, para bien y para mal. Y a ser lechones no nos gana nadie, hay que reconocerlo... pero como una virtud, que ser inocentón tampoco está tan mal, eh!
EliminarY lo del segundo peque... poco a poco, primero tengo que estar convencido del asunto para ir a buscarlo!
Un abriiizo!
ajjajajaajaja!!! soy muy lechona! Especialmente con lo de ver si el niño aun respira de noche y con lo de la ropita! No caí en el gancho de cambiarle el pañal de noche, pues el sueño pudo mas que la lechoneria mía! jajajaj Besos
ResponderEliminarYo creo que todos acabamos siendo más o menos lechones, pero principiantes al fin y al cabo. Supongo que cuando tenga un segundo hijo tendré menos de pardillo y esto tiene sus cosas buenas y malas... las buenas es que yo ne van a pillar en algún renuncio y la mala que se pierde un poco inocencia de la buena.
EliminarChau!
jajajajajaaaa
ResponderEliminarLa fase lechona realmente no se pasa nunca. Mengua, va a menos pero no se acaba de ir. Porque cuando eres lechón en estado puro, no has eliminado aún los excedentes de amorosa oxitocina. Siempre te queda algo, pero entran en escena otros elementos que no es que la anulen, pero es que te acuerdas de cómo te los hubieras comido y te arrepientes de no haberlo hecho!!!
Mmm, la amorosa oxitocina, qué recuerdos, jaja Pues me gusta eso de que la fase lechona no se acabe de ir nunca, es un estado inocente que me provoca ternura.
EliminarUn abrazo Anna!
No sabía que ese era el significado de lechón en España jijijiji me quedo con tu ejemplo de la pijamita de 45 euros... maldición, a todos nos pasa!
ResponderEliminarAh, y si hubieras gritado GOL también habrías sido un lechón: mi esposo lo hizo y el bebé se asustó y se echó a llorar buaaaaaa!!! jajaja :D
Un tipo que grita gol con una hija recién nacida en brazos, es menos lechón, jaja. En ese caso el bebé es más lechón que el padre...
EliminarGracias por pasarte por aqui y dejar tu comentario!
jajajaja divertidísimo como siempre, en Venezuela el lechón es lo que llamamos "conejo".
ResponderEliminarSaludos!
Asi que en Venezuela sería un conejo, eh? Qué follón, el conejo en España tiene otro significado bien distinto...
EliminarBesos hacia el Danubio!
Jajajajaja genial!!! Nosotros fuimos lechones en todo menos en el GOOOOOLLLL!!! Que si lo gritamos y casi matamos a la cría (tenía 2 meses) de un infarto! Un abrazo!
ResponderEliminarIra, no sabes cómo te envidio, yo no tuve fuerzas de hacerlo y hoy, no es que me arrepienta, pero no puedo negar que lo tenga guardadito en el fondo del alma!
EliminarUn abrazo!
Lechón es una palabra que siempre me ha gustado y que me recuerda mucho a un viejo amigo. Ahora, aplicada a la paternidad, ¡gana mucho!
ResponderEliminarMe he reído cantidad!
Ya verás como el "lechón primerizo que se gasta 45€ en un pijama" no se los gasta con el segundo y se va directito a las tiendas de marras! Porque... ¿Vais a por el segundo, no? :-P
Un abrazo
Jajaja, en la actualidad no vamos a por el segundo, tenemos que empezar a pensarlo... pero cuando llegue el momento ten por seguro que iremos a las franquicias de ropa económica (no puedo asegurar que no me dé un garbeo por Mothercare o Prenatal, eh!, jajaja).
EliminarGracias por pasarte y un abrazo!
Ay, lechón!!! Vaya post chulo y autobiográfico que te has marcado. Y todos, toooooood@s nos vemos reflejados en tus lechonadas porque son tan nuestras como tuyas. La espinita del gol de Iniesta sigue presente, eh? Jejejeje. Un besazo
ResponderEliminarVeo que ya me vais conociendo, jeje. Lo de Iniesta me quedó grabado, si...
EliminarY sí, soy un LECHÓN con mayúsculas, pero es lo que toca Carol, yo creo que todos los papás y mamás tenemos ese punto inocentón que nos hace tan vulnerables.
Un beso Carolain!
Soy una auténtica lechona, jajaja, qué bueno, pensaba que ibas a hablar de bebés y me has engañao. Os veo en breve "pasándolo pipa" con un nuevo lechón, ahora sí bebé, en casa... Qué emoción ;-)
ResponderEliminarOtro lechón-bebé en casa!! Deja, deja, sólo me lo estoy pensando... yo creo que todos los que teneis dos hijos quereis que el resto caigamos en la misma trampa, jaja
EliminarChau Bego!
Jajajjaaj todas muy ciertas!!!!! si es que no podemos evitarlo, somos unos lechones y siempre lo seremos... cuando nos miran con esa cara de angelitos y al final consiguen lo que quieren.... LECHONES!!!!!
ResponderEliminarBesos!
Si, hace poco leí un post de un bloggero que hacía referencia a la cara del gato de Shrek, esa escena en la que pone ojitos vidriosos... los hijos son iguales. La Muy puede conseguir de mi lo que quiera cuando se pone cariñosona...
EliminarSí, somos lechones a mucha honra!
Un abrazo!
Jajajaja y ¿qué es un lechón me preguntas clavando tu pupila en mi pupila azul?...Lechón eres tú! Muy bueno, muy identificada.
ResponderEliminarJajaja, estáis que lo tiráis, con poemas y todo. Pues sí, somos lechones pero es lo que venía el el guión de la paternidad, o no?
EliminarUn abrazo MenciA!