¿Lo escribo o no?, los últimos 5 minutos de mi vida los he gastado pensando si debía escribir este post o guardármelo en ese rincón de la memoria donde, pasados unos años, se resetea para desgracia de la humanidad. Qué demonios! (me gusta esa expresión) vamos allá con una de esas afirmaciones de little Ana de complejo entendimiento...
El pasado sábado vinieron a visitarnos unos primetes a los que hacía mucho que no veíamos y de los que la "Muy" no tenía constancia de su existencia. Desde el primer momento hubo conexión positiva entre ellos y Ana desplegó todos los encantos que una niña de 3 años puede ofrecer. Poco antes de la despedida la "Muy" se acercó a Patricia (prima política de un servidor) y estando a solas dijo:
- Mi papá es el chico más guapo del mundo.
Fue una afirmación directa, sin rodeos, pudo incluso sonar a amenaza velada, a mi papá ni te acerques. El caso es que luego vinieron las dos al salón y delante de mí insistió en su aseveración:
- Papá es más guapo que el chico, ehhh... papá de David más guapo del mundo... papá es el más guapo del mundo. A la tercera atinó con la frase que quería reproducir, las dos primeras que hizo en mi presencia fueron disparos de fogueo, pero la último fue definitiva: el tipo que tienes ante tus ojos es mío y es reguapo.
Un servidor, que aprovecha estas oportunidades como si le fuera la vida en ello, se apresuró en afirmar que los niños y los borrachos son personas de fiar, de buen corazón y que nunca mienten.
Patricia ponía cara de perplejidad y le preguntó a la "Muy":
- ¿y mamá? ¿qué es mamá, Ana?
- mmm... mamá, mmm... mamá está loca.
Con esto no quiero herir a nadie, sólo quiero disfrutar de mis 3 minutos de gloria paternal y dejar claro que los papás también tenemos nuestro punto y nuestro rincón en esto de la paternidad.
De hecho es más que probable que todas las mamás tengan un punto de locura, aunque sólo sea para aguantar a esos papás tan simples como un servidor, de lo cual, por cierto, me enorgullezco.
¡Qué peligro! Va a resultar que Freud tenía razón.
ResponderEliminarEse Freud era delantero del Bayern, no?
EliminarEsta bien que te lo creas, porque es cierto. Pero cuando supimos que iba a nacer una niña te dí la enhorabuena porque ibas a tener una incondicional de por vida.
ResponderEliminarElena, te toca esperar a que venga el niño, yo he tenido la gran suerte de tener dos, y no me reconozco cuando me alaban de tal forma que me ven hasta generosa....
Las niñas son de papá, si...hasta que éste se enfada.
Eliminar2 milésimas es el tiempo que tarda la Muy en pasarse al otro bando cuando papá viene de morros.
Jajaja jajajaj pobre madre, desde luego ella tan entregada y te sale con eso, zasca! En el fondo nos querrán cuando tengan 25 XD
ResponderEliminarJaja, con 25 querrán a mucha gente por delante de sus papás. Será cuando nos hagan abuelos cuando nos valoren con objetividad.
EliminarLa verdad es que si que está bueno el padre de la muy...
ResponderEliminarTu tampoco estás nada mal Mon, jajaja qué románticón te me has vuelto, con lo jebi que eras.
EliminarMamá está loca por papá (esta no te la esperabas ¿eh?)
ResponderEliminarY si, papá es el chico más guapo del mundo.
¡Os quiero familia!
P.d.: Anuski, castigada sin Aspitos una semana (sin rencor)
Pues en efecto soy el muchacho más guapo del mundo...es que no puedo ocultarlo más, yo me miraba en el espejo todos los días y me veia pintón pero pensaba que no era para tanto, jajaja.
EliminarPor cierto Ana, cuando mamá esté ocupada recortando, pintando y diseñando te vienes conmigo y te doy todos los Aspitos del mundo.
jajajajaja me da la risa pero creo que me pasa a mí y me hubiera quedado así :S
ResponderEliminarpero ana tiene razón, los papás molan (y sin son guapos más jajajajaja)
Ole esa Bego! Los papás molan, sobre todo a las hijas que suelen ser seguidoras incondicionales de sus papás.
ResponderEliminarOye pues sí, los papás molamos mucho ¡que demonios! (a mi también me gusta la expresión)
ResponderEliminarTenemos que hacernos fuertes en esto de los blog que las mamás nos gana por goleada.
EliminarSupongo que ya pasaste luego el mocho para recoger la baba, me refiero.
ResponderEliminarAl menos Ana no te dice que tienes poco pelo... joío. Suerte que lo dice porque lo llevo corto. XD
Y mejor escribirlo, por supuesto. No has oído nunca la expresión: mejor fuera que dentro. Pues eso...
Ey Moisés, con lo del pelo me has tocado la fibra. Soy unos de los dos supervivientes de mi familia que conserva pelo entre el cogote y la frente... cada vez menos, pero aún me queda peine para unos añitos (5 años más con peine los firmaba ahora mismo).
EliminarHola
ResponderEliminarPor fin me decido a entrar en tu blog. Es que de momento soy más de madres y a los padres os leo poco, no me da la vida. He de decir que me he leído tres seguidos y me han gustado un montón, sobre todo éste, jejeje. Qué graciosa la niña. Por cierto, a mí mi hija me dice también que estoy loca, va a ser que sí, que todas lo somos un poco.
Buenas Bego, los papás también queremos un poco de tarta! Las hijas siempre han sido mucho más de los papás que de las mamás, supongo que eso no alivia el rencor materno a las hijas, pero coincide en la mayoría de casos que conozco!
EliminarBienvenida por aqui y quédate el tiempo que quieras, tengo té y pastas al fondo...